Vistas de página en total

viernes, 1 de octubre de 2010

Hablemos de los empleados

Trabajo, juegos online, vagos, empleo, empresarios, paro, Nieves Angulo.



Desde que tengo uso de razón y según voy cumpliendo años, intento ser cada vez más objetiva, más imparcial e independiente, tanto en mi vida cotidiana como en mis escritos o reflexiones y siguiendo estas pautas hoy quiero hablar de los empleados por cuenta ajena.

Siempre se habla de los empresarios y la mayoría de las veces mal, muy mal.

Pues mi post de hoy va a ir de algunos empleados y voy a hablar de ellos mal, muy mal.

Hay empleados que:

Llegan tarde a trabajar y después que sus jefes y se marchan antes.

Se cogen bajas injustificadas por enfermedad.

Juegan al solitario u otros juegos on-line en el ordenador, en horas de trabajo.

Si su trabajo lo realizan en la calle, la labor que podían hacer en una hora, la extienden horas y horas, porque aprovechan la ventaja que les da la calle, para; hacer compras, tomarse una/unas cervezas en el bar e incluso hacen gestiones propias y privadas que no tienen nada que ver con su trabajo.

Luego están los empleados “multiusos” como los denomino yo, normalmente su puesto es de administrativo y llenan su mesa de trabajo de papeles, documentos y cosas mil, para parecer que está liadísimo, también sube, baja, va, viene, como un torbellino, pero cuando termina la jornada laboral y te paras a pensar y repasar, ves que esta persona realmente no ha hecho nada o muy poco ¿quién no conoce a alguien así en su empresa?

Trabajadores que hacen llamadas de teléfono privadas y como digo en horario laboral.

¿Quién no ha pasado por una obra de construcción y ha visto trabajando a un obrero y mirándole o rascándose la barriga a tres?

¿Quién no ha visto a transportistas tratando mal los envíos de paquetes o embalando deplorablemente objetos, con los efectos secundarios que eso conlleva?... materiales delicados rotos o dañados y por supuesto los gastos generados porque esa falta de cuidado y profesionalidad, lo tendrá que pagar “alguien”.

Podría seguir hablando de empleados por cuenta ajena caraduras, pero creo que os habréis hecho una idea bastante clara de la cuestión.

Gracias a estos empleados tan especiales España se encuentra a la cola de los índices de productividad empresarial, por lo tanto, el capital inversor extranjero, se lo piensa muy mucho antes de dar un paso en este sentido, o sea invertir en nuestro país.

También existen, los empleados que se niegan a ser formados dentro de los Programas Formativos establecidos, tales como Formación Continua y Formación Bonificada que por cierto, es el “malvado” del empresario el que paga la mayor parte de estos programas, dentro de las cuotas de la Seguridad Social… sí o sí. (Aconsejo encarecidamente que miréis con detenimiento vuestras nóminas y no os limitéis a firmar sin más)

A estos empleados, a estos parásitos, les paga el salario, las vacaciones, parte de su Seguridad Social, bajas por enfermedad, llamadas privadas de teléfono, etc… “el cabrón del jefe” y en muchos casos, este jefe es un pequeño empresario, que va apretadísimo a final de mes, gana lo justo para sobrevivir y no cerrar la empresa para dejar a sus empleados en la puñetera calle.

Desde luego releyendo esta reflexión, llego a la conclusión de qué buenos son los empleados y qué malos los empresarios.


Nieves Angulo


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Lectores del blog de Nieves