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martes, 26 de enero de 2010

A RIO REVUELTO…




Llamadme incrédula y posiblemente acertéis a medias.

Creo en ti, amigo buen samaritano.

Pero no me creo nada sobre “las ayudas”.

Números de cuentas bancarias.

Famosos en tele-maratones recaudando dinero o viajando al corazón de la desgracia.

Llamadas a la compasión para que se envíen dinero y alimentos a tal o cual lugar.

Y no me lo creo porque pasan los años y los países que fueron golpeados por una catástrofe, siguen igual de pobres y siguen sin casas, sin alimentos, sin alcantarillado, sin sanidad…en fin, sin un mínimo de infraestructuras.

¿Dónde fue a parar ese dinero conseguido en los tele-maratones por los famosos de turno?

¿Y el que tú, amigo iluso y de buen corazón, con mayor o menor esfuerzo ingresaste en una cuenta bancaria?

Voy a hablar del caso de España que es donde vivo y que conozco de primera mano.

En primer lugar amigo buen samaritano, tú ya estás ayudando a un país caído en desgracia en el momento en que España manda fondos, alimentos, ayuda de la Cooperación Internacional etc… y digo bien porque lo hacen con tus impuestos, ¿o de dónde crees que sale ese dinero o esa ayuda ?, si por el contrario no pagas impuestos, pues allá tú con tu conciencia, porque los que si pagamos mandamos ayuda también en tu nombre.

Recordad bien en la fecha que leéis este post, yo por mi parte le guardaré a buen recaudo, porque ya veréis como dentro de unos años podréis comprobar lo acertada que estuve en el año 2010, cuando os dije que un país devastado, devastado iba a seguir unos cuantos años después, recuerdad la situación actual de los países afectados por el Shunami de hace ahora 5 años, por poner solo algún ejemplo, pero hay muchos más.

Una vez más amigo mío, te han manipulado, han removido tu conciencia, han estrujado tu corazoncito.

Si necesitas limpiar tu conciencia amigo buen samaritano, no lo hagas mandando dinero ni alimentos ni ropa por tu cuenta, porque te puedo decir sin miedo a equivocarme que no va a llegar a su destino o bien llegará un mínimo, pero que en el recorrido hará ricos o más ricos a algunos depredadores.

Si como digo, quieres colaborar de alguna manera, vete de voluntario si estás en el paro, por ejemplo, o si el que está en el paro es alguno de tus hijos, convéncele para que vaya él, que seguramente estará en la cama a las doce de la mañana porque el día anterior se fue de “farra” con tu dinero.

Lo que se necesita ante todo en esos países desvastados, es mano de obra, médicos, ingenieros y personas que con sus conocimientos puedan ayudar a salir del infierno a esas gentes.

Con ese dinero que ingresas en tal o cual cuenta bancaria, lo que estás haciendo es ayudar a que esa entidad capte pasivo y pueda jugar con ese dinero, así es que realmente al que estás enriqueciendo es al banco, tú a cambio tienes un poco menos dinero en tu cuenta y como ya he dicho el dinero al final no llegue a su destino o que llegue bastante mermado.

El famoso por su parte, sigue siendo igual de rico, pero además consigue más notoriedad de la que ya tenía y tú, amigo iluso y posiblemente de buen corazón dirás con voz arrobada, que bueno es fulanito o menganito, que buen corazón tiene.

Dudo que a la mayoría de estos famosos les mueva el corazón.

Como ya os digo soy bastante incrédula.

Snow

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