He visto la maravillosa película “Mi nombre es Harvey Milk”, por supuesto, bajo mi punto de vista, pero no quiero hablar de la película, aunque sigo insistiendo que me pareció maravillosa y no sé si por el tema en sí, o por la que me pareció una magistral interpretación por parte de Sean Penn y el resto de actores.
Quiero hablar de la homosexualidad y “las salidas del armario”.
No entiendo muy bien por qué un famoso o una persona anónima de repente nos cuenta su preferencia sexual, ¿tan importante es?
¿Le importa a alguien, medianamente inteligente y carente de morbo, que una persona sea homosexual o no?
Yo, como muchas otras personas, he conocido y conozco a unos cuantos gays, unos me lo han confesado y con otros he hablado abiertamente dándoles a entender que lo sé y que me importa una mierda si es o no es homosexual.
No voy por el mundo preguntando a nadie lo que hace en la cama y cómo folla y con quién, primero porque me parece que lo que hace cada uno en su intimidad, es eso, íntimo y segundo, porque no influye para nada en mis valoraciones para considerar a una persona amigo o no.
Recuerdo un día que me presentaron a un hombre homosexual (con mucha pluma, por cierto) y me dijo: - Soy gay -. Yo le contesté: - Pues yo me tiro a mi pastor alemán los lunes, miércoles y viernes, el resto de la semana busco otras sensaciones - . Por supuesto se quedó muy cortado y creo que no le caí muy bien, no le he vuelto a ver.
Con esto quiero decir que no entiendo muy bien “las salidas de los armarios” porque a nadie le concierne la intimidad de nadie.
Tampoco entiendo bien la susceptibilidad de algunos homosexuales, me explico.
Si se cuenta un chiste delante de un homosexual y el tema va de gays, inmediatamente se encuentra con miradas críticas, sobretodo por parte del aludido. ¡Relajémonos, que se trata de un chiste! Si cada vez que cuentan un chiste de cojos, gordos, o mujeres, me lo tomo de manera personal y me ofendo, me pasaría el día llorando por los rincones, insisto, ¡relax!.
Otro ejemplo: si una persona, hablando coloquialmente llama maricona a un gay “saltarín”, también es increpado y tachado de homófobo, por cierto, palabra ésta que no aparece en la RAE, sin embargo, un gay, llama a otro gay : Reinona, maricona, loca y otros adjetivos similares y nadie parpadea, no pasa nada. ¡Relajémonos! una vez más, que se trata de una manera de hablar, no de faltar el respeto a nadie, salvando estas diferencias se conseguirá avanzar más en la lucha.
El homosexual ha ido poco a poco y gracias a su lucha y reivindicación obteniendo “normalidad”, en este mundo tan crítico e imperfecto en el que vivimos, ya sé que falta mucho, ya sé que posiblemente no se consiga todo lo que se desea, pero así es la vida.
Y para terminar voy a lanzar unas preguntas, que me encantaría que alguien me responda y que sé con total seguridad, que estas preguntas no me las hago solo yo, sino muchas personas.
¿Tiene algo que ver, ser homosexual, con ir por la calle dando saltitos, grititos atiplados o hablar con la voz aflautada, contoneándose de manera exagerada?
¿El homosexual qué tiene este comportamiento, esta pluma, quiere imitar a la mujer?
Si es así, yo como mujer tendría que sentirme ofendida porque es una burda caricatura hacía mi género.
Pero no me ofendo, porque yo ante estas situaciones ¡¡¡¡RELAX!!!
N. Angulo
Efectivamente, no creo que seas la única que se hace algunas de las preguntas que dices. Estoy de acuerdo que las caricaturas no tienen nada que ver con lo que hacemos-somos la mayor parte de las mujeres.
ResponderEliminarPero en ese razonamiento también entran los chistes, que como suelen jugar con los mismos tópicos y caricaturas, entiendo que son molestos ( a mí a veces me molestan) pero también es cierto que cada colectivo suele ser los que cuentan los mejores chistes de sí mismos.
De todas formas, lo mejor creo que lo mejor es aplicar un sano sentido del humor a todo y desdramatizar el día a día. Cuando me doy cuenta de que ando demasiado tiempo con el humor demasiado encorsetado, intento reírme de mi misma para relativizar. Por suerte la "imperfección" y la diferencia, son la base del atractivo individual de cada persona, y lo único que nos libra de ser masa.
Creo que parte de ese comportamiento a la defensiva radica en la discriminacion no solo de parte de los homofobicos, sino la que hay dentro de su "mente". Aquella mente a la que por decadas les dicen que no son normales por ser quienes son, entonces se ofenden ante cualquier comentario o accion que de alguna manera los haga sentir incomodos. Así paso con las primeras mujeres independientes y con los primeros esclavos liberados. Con la discriminacion se ponen a la defensiva si se menciona siquiera una palabra relativa a lo que pasaron en epocas de discriminacion total.
ResponderEliminarSobre los "saltitos" de mujer, creo que realmente quieren ser y sentirse una mujer y es su manera de expresarse. Como que vemos muchos chicos que imitan a sus artistas favoritos porque quieren ser como ellos: se visten igual, se peinan igual, tratan de hablar las mismas frases o palabras, quieren tener el mismo estilo...No creo que sea una burla o que de alguna manera nos ofenda. Si sale exagerado es quizas xq al ser hombres, creen que tengan que esforzarse mas por parecer femeninos.
Lo único que no me gusta es que me he topado algunas vez con gays que odian a las mujeres (incluso una vez nos tiraron piedras a un grupo de amigas, solo x ser mujeres), y eso tampoco me va, eso si es exagerado.
Siempre he dicho Mayo, que hay homosexuales que odian a las mujeres, no sé si consciente o inconscientemente pero es así. Pongámonos en el mundo de la moda, se nota enseguida que diseñador es gay y quién no lo es, los gays hacen unos diseños, que francamente, muy pocas mujeres se ponen, afean y ridiculizan a la mujer. Pero bueno, peor para ellos. Estoy de acuerdo contigo en el tema de que estén a la defensiva, pero poco a poco, como ya he dicho, tendrán que relajarse. Un abrazo
ResponderEliminarCuando los homosexuales (gays y lesbianas) no se consideren un colectivo y se vean como seres humanos con sus luces y sombras, esa discriminación desaparecerá.
ResponderEliminarLos colectivos tienden a crear circulos sociales cerrados con unos determinados roles singulares que les hace diferentes al resto. Ahí está la cuestión. Ellos mismos se consideran colectivo y de esta manera la pretendida integración es lenta y dolorosa y sin sentido común.
A mi realmente no me parece normal que proclamen su condicción sexual. Los heterosexuales no divulgamos nuestras preferencias sexuales. No creo que sea necesario hacerlo.