ME GUSTA BESAR

Hoy estaba sin mucha inspiración para escribir un post, pero escuchando una canción me han llegado las tan esperadas musas.

Quiero reflexionar sobre besos y como ya he dicho en el título de este post, me encanta besar.

No conozco mejor manera para demostrar mi afecto hacia una persona que besándola.

Cuando besas a un amigo, por ejemplo, en la demora de ese beso, en lo que te acercas o no, en lo que aprietas o dejas de apretar, demuestras hasta dónde te importa este amigo.

Hay besos que no son besos, cuando alguien se te acerca, pero no te besa, simplemente hace el gesto, pero sus labios no te rozan, esto no es un beso, no me gusta, no lo quiero, mejor que se lo ahorren, si no quieren besar que estrechen manos, pero si se hace la intencionalidad, debe besarse y no quedarse en el camino, me parece un acto hipócrita.

Hay muchas maneras de besar, muchas clases de besos.

Besos juguetones: Estos me encantan, me pasaría el día jugueteando con los labios de la persona amada; besitos cortos, suaves, secos y apretados, sanadores, risueños...

Besos amantes: ¡Ay, estos besos! , húmedos, hambrientos, sabedores, ávidos, posesivos, devoradores. …, boca contra boca. Estos besos hacen que te tiemblen las piernas, ¿las piernas solo?, hacen que te tiemble todo el cuerpo, que no quieras abandonar la otra boca nunca, que se pegue a la tuya por toda la eternidad, como si de una tabla salvadora en alta mar se tratase, te aferras a esa boca y no quieres soltarla.

Besos castos: Son aquellos que se dan a alguien que acabas de conocer y todavía no tienes claro si pasa por tu vida para quedarse o simplemente es que “pasaba por aquí” , son besos que apenas rozan la mejilla de la otra persona, pero tienen un toque de esperanza. Posiblemente pasadas unas horas, cuanto llegue el momento de la despedida, el beso será distinto, si ha sido como el del saludo, mal vamos, si por el contrario, ha ido acompañado de un pequeño abrazo, incluso has apretado un poquito los labios contra la mejilla del receptor, ya estás diciendo que te ha gustado como persona, que te ha caído bien y que hay muchas posibilidades de un segundo encuentro.

Besos amigos: A mis amigos, a los que quiero, indiferentemente del sexo, me gusta darles un leve beso en los labios, con este gesto les estoy informando que les quiero mas que a los demás y que me importan lo suficiente.

Podría seguir hablando de besos infinitamente, pero me voy a despedir con varios fragmentos de la letra de la canción que ha sido la inspiradora de este post.

Un beso de esos que bajan la guardia.

Un beso de esos que cumplen un sueño.

Un beso de esos que luego te marcan.

Amigos míos, con un beso de esos, quedó mi vida prendida al hombre de mi vida.

N. Angulo